¡Aaaay! ¡El Miedo!
En mi opinión, es el mayor freno en tu camino a cualquier cosa que te propongas, y a su vez un gran obstáculo para tu tranquilidad interior, tu bienestar y tu plenitud.
Sobra recordar también el efecto que produce sobre tus niveles de estrés.
Pero en realidad ¿qué nos asusta exactamente? ¿cuál es la verdadera fuente del miedo? Quizás descubriéndola puedas conseguir una mayor estabilidad interior en cualquier situación.
Lo que quiero destacar en este artículo es que nunca tienes miedo por la razón que crees.
Si por ejemplo, estás a punto de dejar tu trabajo porque crees que te mereces una vida más plena y satisfactoria, lo más seguro es que sólo con pensarlo surja en ti una intensa sensación de inquietud. Empezarás a sentir miedo porque pensarás cosas del tipo:
- ¿y si al final no encuentro otro trabajo?
- ¿y si me paso los próximos años, sin trabajo, sin paro, sin ayudas y al final me quedo sin poder costearme mis gastos?
- ¿y si me decido a emprender y al final fracaso?
Si por ejemplo, te das cuenta de que quieres romper con tu pareja porque crees que tu relación actual no te aporta lo suficiente, lo más seguro es que te entren dudas (miedo) del tipo:
- ¿y si tomo la decisión equivocada, y luego me doy cuenta de que es mi media naranja ?
- ¿qué pasará si no encuentro ninguna otra pareja con la que compartir mi vida?
- ¿y si al final me quedo sola/o?
Ocurre lo mismo cuando por ejemplo quieres tomar una decisión trivial, como por ejemplo comprarte ese artículo tan caro que tanto deseas desde hace meses:
- ¿qué pasa si luego me arrepiento de haberme gastado ese dinero?
- ¿y si luego me aburre ese traje, vestido, móvil o televisor?
Al final, la respuesta a todos esos «y si…» es: TE SENTIRÁS MAL CONTIGO MISMA/O.
Por lo tanto, cuando tienes dudas, estás preocupada/o, sientes ansiedad, desesperación o arrepentimiento, en realidad lo que está ocurriendo es que tienes miedo de sentirte mal contigo misma/o (por no tomar la decisión adecuada).
Las sensaciones de decepción o frustración con respecto a ti misma/o, son tan desvastadoras que simplemente huyes. Tienes miedo a sentirlas, intentas por todos los medios protegerte de ello, evitar que ocurra. Es en este punto, en ese intento de protección que surgen todos esos pensamientos de duda, indecisión, inseguridad, preocupación. Es justo ahí dónde entra en acción tu Autosaboteador, y por tanto cuando nace tu miedo, tu ansiedad, tu malestar, tu estrés.
Lo bueno es que existe una solución a este problema tan habitual ( aunque inconsciente para la mayoría). Esta es sencillamente:
Sentirte bien contigo misma/o pase lo que pase
Esto soluciona todos los miedos, todos.
Imagina por un momento, que fueses capaz de sentirte bien «en tu piel» en todo momento, en toda circunstancia. Imagina que en un futuro no muy lejano hubieras logrado quererte y apreciarte tanto que cualquier error, equivocación o fracaso no tuviera en ti ningún efecto.
Si supieras que pase lo que pase, siempre te sentirías orgullosa/o de ti misma/o… ¿Sentirías tanto miedo a la hora de tomar decisiones importantes? ¿Tendrías tantas dudas a la hora de tomar decisiones triviales?
Si hay algo que he aprendido en estos últimos años es que al final, todos buscamos en última instancia ser felices (sentirte bien contigo misma/o). Todo lo que haces, ideas y persigues tiene el propósito último de procurarte bienestar, de hacerte sentir bien (aunque no siempre lo consigas).
Y uno de los mayores errores que cometemos es pensar que nos sentiremos mejor, cuando alcancemos tal o cual cosa o situación de vida. Pero el fin último, en realidad, siempre es sentirte bien, es decir, estar a gusto contigo misma/o.
Dicho esto, ahora tienes dos opciones, o bien establecer los cimientos de tu bienestar sobre arenas movedizas:
- Esto es, sentirte bien cuando logres tener éxito en cada cosa que hagas o te propongas.
O bien puedes escoger, establecer los cimientos de tu bienestar sobre un terreno firme e inamovible:
- Esto es, sentirte bien contigo misma/o porque entiendes por fin que, pase lo que pase, lo has hecho lo mejor que has podido.
Cuando crees en ti: te das permiso para equivocarte, y no hay situación a la que no puedas hacer frente, porque entiendes que los errores que puedas cometer no son más que resultados reversibles, es decir, que pase lo que pase, encontrarás la manera de solucionarlo o gestionarlo tarde o temprano.
Cuando comprendes esto y lo integras: te sientes bien, sacas lo mejor de ti y por tanto puedes resolver de forma brillante cualquier error, equivocación o fracaso.
Cuando sabes que ocurra lo que ocurra, encontrarás la manera de salir adelante… entonces el miedo a sentirte mal contigo misma/o ya no es un obstáculo, sino solamente una señal para recordarte que necesitas seguir creyendo en ti, reconfortarte a ti misma/o y sacar lo mejor de ti para conseguir lo que te propongas.
Soy Sandra Gonzalez, experta en Autoconfianza y Motivación Laboral. Ayudo sobretodo a mujeres trabajadoras a sentir más seguridad en si mismas para que logren recuperar la motivación y el bienestar en su trabajo, mientras aprenden a alejarse del agobio, las preocupaciones y el estrés propios del entorno laboral.
Si quieres aprender pasos para la reduccion del estres, y a adquirir una nueva mentalidad más saludable, mira aquí lo que tengo preparado para ti 🙂
Un abrazo!
Sandra.
Imagen: Fotolia – © Tinatin
2 Comentarios
Muchas gracias, Sandra!! Muy bienvenido tu post!! Me pasa seguido lo que aquí relatas! Gracias por tu invitación a sentirme bien conmigo misma. Lo recordaré!! Abrazoss desde mi Patagonia Argentina!!!
Un placer María Teresa, encantada de verte por aquí 😀