fbpx

Gestión del Tiempo desde el Corazón

Woman holding a clock over face against orange backgroundExisten numeroso libros acerca de la gestión del tiempo, que tratan de darnos claves y sistemas para que mediante su utilización consigamos reducir el estrés, al mismo tiempo que aumentamos la productividad personal. Los 3 libros acerca de esta temática que he leído hasta ahora son:

– Los 7 hábitos de la gente altamente efectiva, de Stephen R. Covey
– Organízate con eficacia, de David Allen y
– El poder de lo simple, de Leo Babauta

 

Desde mi punto de vista, los 3 libros son extremadamente interesantes porque pueden aportarte una nueva perspectiva sobre cómo escoger las tareas que debes hacer en cada momento, y también ayudarte a encontrar la motivación que necesitarás para llevarlas a cabo.

De mi propia experiencia puedo asegurar que estos sistemas son muy eficaces si tienes muy claro qué es realmente importante para ti y además eres extremadamente congruente con ello. A mi entender, esto es lo más difícil, porque no solemos hacernos esta pregunta muy a menudo. Es como si día tras día nos dejásemos llevar por lo urgente que “el trabajo”, “la familia”, “la pareja”, “la casa”, etc, nos ha puesto delante. Intentamos hacerlo todo tan bien como sabemos, pero no nos paramos a pensar si eso que estamos haciendo lo hemos escogido conscientemente, o simplemente nos hemos dejado llevar por “el deber”.

Stephen Covey en su libro de “Los 7 hábitos”, si nos habla de la misión y visión personal pero creo que lo hace de manera algo complicada a la hora de entender la trascendencia real de este primer e importantísimo punto en la Gestión del Tiempo.

La Misión y Visión Personal

¿Cómo voy a saber qué hacer primero en cada momento, cómo organizar mis días, semanas, meses y años,  si no sé qué es realmente importante para mi, o hacia dónde quiero ir? Los sistemas de gestión del tiempo que he nombrado antes son muy buenos, pero de qué sirven si no empiezo por determinar qué es lo quiero conseguir realmente a largo plazo.

En mi opinión, solemos dejar este punto de lado porque en realidad nos da miedo abordarlo, ¿y si descubro que la vida que estoy llevando, lo que creo que es prioritario para mi, en realidad no me gusta? Es decir, entiendo que esto es lo que “debo” hacer ahora mismo, pero ¿es lo que realmente “quiero” hacer?

Porqué digo que nos da miedo, pues por propia experiencia. Poner las cartas sobre la mesa y sincerarte contigo misma puede llevarte a un estado de colapso interior, desagradable al principio, pero sin duda increíblemente transformador y satisfactorio si consigues al final ser más congruente con quién eres realmente.

 

La coherencia

¿A qué me refiero con ser coherente? Muy sencillo: a que tus valores, pensamientos y acciones estén en la misma “onda”, que sean coherentes entre si.

Por ejemplo, si soy vegetariana porque amo la vida animal, pero trabajo en un matadero, obviamente, lo que hago no es congruente con mis valores. Así que probablemente estoy haciendo lo que “debo”, pero no lo que “quiero”. No hay coherencia.

¿Qué hace la mayoría de la gente? “Correr un tupido velo”. Se leen libros de gestión del tiempo, van a cursos sobre gestión del tiempo e intentan ser cada día más eficaces, productivamente hablando. Y, ojo, esto está muy bien, no hay ningún problema si es lo que quieres hacer.

Ahora bien, este artículo está dirigido a esas personas que empiezan a cuestionarse si sus vidas están tomando el camino más correcto, o como a mi gusta llamarlo: más coherente.

El precio de la incoherencia es el estrés. Personalmente a mi me estresa mucho hacer una tarea que no me apetece en absoluto (no por pereza, sino porque hay algo dentro de mi que me dice que eso no está bien).

¿Qué pasa cuando poco a poco y con tesón voy resolviendo las incoherencias en mi trabajo y en mi vida? Pues que la gestión del tiempo viene sola. Una vez sé con exactitud hacia dónde quiero ir, y qué es lo realmente importante para mi, además, de manera exacta, sabré cómo utilizar mi tiempo de manera eficaz.

El objetivo último es, por tanto, alinear lo que sientes, con lo que piensas, dices y haces, de manera coherente. Así que si todavía no sabes contestar a la pregunta ¿qué es lo realmente importante para mi?, puedes centrarte en la siguiente pregunta: ¿cuáles son las incoherencias con las que “convivo” actualmente?

Identifícalas, asúmelas, esto es: acepta que están ahí, sé consciente de ellas. Con esto basta para empezar, no te agobies, no pasa nada, prácticamente todos las tenemos, no es nada malo, no les tengas miedo.

A continuación te doy algunas pistas. Probablemente hay incoherencias en tu vida si:

  • tiendes a dejar para mañana lo que deberías hacer hoy (procrastinación)
  • sueles auto-sabotearte a ti misma cuando te propones algo,
  • no persigues los objetivos que te marcas,
  • sientes miedo al rechazo, timidez,
  • sientes a menudo ira, frustración, resentimiento,
  • frecuentemente contienes tus emociones para que no te desborden.

El siguiente paso será trazar un plan o camino que te lleve a tomar decisiones en pro de resolver esas incongruencias, tanto dentro de tu vida profesional, como de tu vida personal. Esto puede llevar meses e incluso más bien años. No importa, de todas formas esos años van a pasar igual, ¿no sería mejor aprovecharlos para ser cada día más coherente contigo misma?

Lo importante es no “acomodarse”. No te conformes con una gestión del tiempo desde la incoherencia, cuando tienes a tu alcance otra salida más congruente con lo que Eres.

En resumen, la manera más simple de aprender a gestionar tu tiempo, es ser fiel a ti misma, cuando consigues ser coherente con esto, la gestión del tiempo pasar a ser prácticamente intuitiva. Todo fluye. Mucho ánimo!!

Espero que este post te haya gustado. Si quieres compartir tu experiencia sobre este tema, no dudes en dejarme tus Comentarios más abajo. Gracias!

Un abrazo!

Sandra.

Imagen: © dzimin – Fotolia.com

Deja un comentario

*campos obligatorios Please validate the required fields

*

*

CoachingPro by Sandra González. Bienestar en el trabajo